Desde mediados de octubre, el equipo de investigadores de Fundación MERI se encuentra en terreno, en la Reserva Natural de Melimoyu, en la región de Aysén. Este año, la expedición tiene como objetivo continuar el trabajo comenzado en 2016, basado en la recolección de muestras para dos proyectos de la fundación:
Este estudio tiene como propósito mejorar los conocimientos sobre la biomagnificación (transferencia en concentraciones crecientes de presa a depredadores a través de las tramas tróficas acuáticas) del mercurio en el hemisferio sur y sobre la influencia del paisaje y de los sistemas de agua dulce en estos procesos en los fiordos de la Patagonia.
El mercurio es en extremo tóxico para los seres humanos, los ecosistemas y la vida silvestre. En el caso de los seres humanos, en altas dosis puede ser mortal, y en bajas, puede provocar graves problemas en el desarrollo neurológico de las personas expuestas. Además, disminuye la actividad microbiológica en los suelos que lo contienen y en el ambiente se transforma en metilmercurio, su forma más tóxica.
- “La Guerra de los 100 años: evaluando los efectos de salmónidos sobre los peces nativos, en pequeños arroyos de los sistemas dulceacuícolas en la Patagonia”. Proyecto liderado por la Dra. Paulina Bahamonde, con financiamiento parcial de The Rufford Grant Foundation, cuyo objetivo es la exploración de 3 aspectos:
– determinar la biodiversidad de los peces en el río Colonos y el río Marchant,
– determinar la superposición de hábitat y la competencia con las especies invasivas,
– explorar la toma de decisiones relacionada con el Sistema de micro hábitat de los ríos para mejorar la reproducción y supervivencia de los peces.
